Huye o Enfrenta El Horror

Al fin pudé llegar al torneo junto a Pedro, observé mi entorno y había una gran cantidad de personas en una tribuna, por lo que decidí ubicarme en lo mas alto del lugar, donde aparentemente no había nadie más; la primera batalla que ví ya había iniciado, pero, estaba a punto de finalizar... repentinamente uno de los luchadores desapareció, al menos eso escuchaba por parte de los demás, pero yo podía verlo... luego de unos instantes el luchador decapitó rapidamente a su contrincante y logró ganar facilmente. Después de haber observado dicho suceso me interesé aún más por participar en el torneo, en el cual ya estabá inscrito. Luego de un rato, me llamaron a la arena de combate, acudí de inmediato, pero, me llevé una gran decepción al ver a mi oponente, solo era un niño que no me suponía ningún problema, estaba temblando y seguramente estaba aterrorizado; lo primero que pensé en aquel momento fue en acabar rápidamente con él para esperar a mi siguiente oponente, me acerqué lentamente, mientras él solo podía observar que me dirigía, el temor que tenía aquel niño en ese momento no le permitió hacer absolutamente nada... cuando me postré frente a él solo puse mi mano en su hombro y activé mi habilidad "Absorción de Regeneración Célular" y finalicé el... ¿combate?. Luego de lo sucedido llegaron varios ninjas médicos a tratar a aquel niño.

Regresé a mi lugar, y ví que mi compañero Pedro estaba luchando, con solo ver a su oponente supe de inmediato que tenía un nivel de poder muy alto, y que seguramente Pedro no podría hacerle frente; por esto, me puse en guardia, y si era necesario iba a interferir en aquel combate. Mientras veía como se desarrollaba la batalla me llamaron nuevamente a la arena de combate, pero, me quedé donde me encontraba, no pensaba ir bajo ningún motivo, sin embargo, me di cuenta que el oponente de Pedro no tenía ninguna intención de matarle, solo se dedicaba a jugar con él de alguna manera, por lo que acudí a la voz que me llamaba insistentemente a luchar.

Al llegar a la arena observé a quien ahora era mi nuevo oponente, era una chica que tenía un atavío de color azul, un largo cabello de color rojo, y un arete que destacaba por ser demasiado grande en el cual tenía unas pequeñas esferas; en el momento que inicío el combate una de las esferas de su arete se desvanecío e invocó un gran Dragón de manera defensiva, después de ver esto me quedó claro que ella era el oponente que esperaba, y, activé mi <Sharingan>.